La arquitecta japonesa Kazuyo Sejima, ganadora del Premio Pritzker 2010, la primera mujer en hacerse cargo de la Bienal de Arquitectura de Venecia, y es quien ahora preside una conferencia magistral en Cersaie Bolonia 2011.
Si Kazuyo Sejima es lo que parece, pequeña, frágil, casi suspendida en el espacio, también es 
como su arquitectura: no tiene nada que ocultar y juega con la transparencia, lo inmaterial, la relación entre interior y exterior. En una relación con el entorno que es más bien un diálogo, es una relación que puede cambiar el espacio y el espacio cambiar nuestra conducta, y la arquitectura no puede ser descartada. Las superficies reflectantes, las fachadas que recuerdan a las imágenes reales o crean otras nuevas, incluso ilusorias. Los volúmenes que se ajustan al terreno e invitan a entrar y salir, para observar el interior y miran hacia fuera. El resultado es una arquitectura de gran impacto y atractivo, capaz de hechizar a todo el mundo. Ello lo demuestra el abarrotado auditorio del Palacio del Congreso, donde participó en el marco del programa programa “Costruire, Abitare, Pensare”.
Ganadora, el año pasado, el prestigioso Pritzker de Arquitectura , Kazuyo Sejima ha seguido otros proyectos recientes e importantes en suelo europeo, el Centro de Aprendizaje de Rolex en la Ecole Polytechnique Federale de Lausanne, Suiza, abrió sus puertas en marzo de 2010, el nuevo hogar de Museo del Louvre en Lens, Francia, en construcción.
La innovación y la tradición de años, Kazuyo Sejima ha puesto de manifiesto sus proyectos más importantes llevadas a cabo en Japón, Europa y los Estados Unidos.
El evento, inaugurado por Alfonso Panzani, presidente de la Comisión de Investigación e Innovación Tecnológica de la Confindustria Cerámica, que ha traído los saludos de la Asociación, fue presentado por Fulvio Irace, arquitecto y profesor de historia del Politécnico de Milán. "Kazuyo Sejima: un vistazo a la escena urbana de una manera diferente otra vez", dijo Irace. "Desde una perspectiva emocional y de procedimiento, en función de cómo la gente se acerca y el uso de los espacios. Y así, la constante de su trabajo es interpretar los lugares desde el punto de vista de los que viven. La etiqueta del minimalismo, que se aplica a menudo, no es realmente adecuado para su trabajo. Llamo maximalista: porque amplifica el máximo impacto en el cuerpo. El espacio se convierte en el gran campo magnético donde actúa la gente. Sin embargo, otra peculiaridad de sus proyectos - Irace continuó - es plantear preguntas, inquietudes, ideas ".
"Desde el comienzo de mi carrera, estoy interesada en la conexión entre el interior y exterior", dijo 
Kazuyo Sejima, la descripción del proyecto para el Museo del Siglo 21 de Arte Contemporáneo de Kanazawa, en 2004 recibió el León de Oro en la 9 ª Exposición Internacional Bienal de Venecia de Arquitectura. Un edificio no sólo debe tener la función de un museo, sino también el espacio público. La idea central es que en función de los usos, cambiar la apariencia de los edificios. Es importante que el diseño de estructuras que puedan cambiar dependiendo de quién los utiliza y mirar a su alrededor.
La arquitecto explicó entonces la filosofía del Nuevo Museo de Arte Contemporáneo de Nueva York. "En lugar de crear un volumen cerrado, como es habitual, galerías de arte, hemos creado una estructura verdaderamente abierto a la ciudad, donde los visitantes, con terraza y vistas, se puede ver la ciudad y la ciudad, a su vez, se puede ver lo que sucede en el interior. En los edificios del distrito son muy bajos. El museo se encuentra tan alto.
Estados Unidos, donde la gente, caminar puede sentir el cambio en las imágenes reflejadas en las paredes de vidrio. "A veces ves de cristal, a veces reflejan las imágenes que se superponen con los demás. Algunos son reales, otros se mezclan otras ilusiones. En general, una imagen emerge líquida.
De gran interés entonces el proyecto de la Universidad Politécnica Federal de Lausanne. "El 
objetivo, dijo Kazuyo Sejima" era crear un lugar de encuentro para estudiantes, accesible desde todos los lados. Hemos creado un mínimo de un edificio de un piso, con piso y techo ondulado, donde, en un momento dado, no se tiene la impresión de estar en un espacio único de gran tamaño. En el interior es como caminar en las colinas o valles. Cada volumen tiene una visión diferente o función, el exterior o la íntima, mucho más".
Por último, el Museo del Louvre en Lens, Francia, desde donde se han completado las dos primeras fases, y la cirugía sigue siendo para completar el cerco de lo que se ha hecho con una sola fachada. Hemos creado un edificio que no altere el lugar donde los restos de la minería antigua. Un proyecto que modifica su posición geográfica, en este caso la adaptación al medio ambiente.
La famosa arquitecta, por primera vez en Bolonia, también ha expresado su asombro por la ciudad: "Y hermosa" - dijo -. Ayer por la noche mientras caminaba me sentía como entrar en un teatro, que casi podía etapa de espectáculos y actuaciones en todos los rincones. "
