En un apartamento de 65 m2 de Milán, encontramos esta estancia encantadora. De inicio llama la atención la atmósfera de calidez que prima en ella. Dos aspectos la enfatizan, los pisos de madera laminada y el muro de ladrillo al descubierto; a los que se suma la viguería del techo y la parte inferior del piso del tapanco habitación que .
En combinación con los tonos neutros predomina el muro verde lima, un color frío que, sin embargo, al reflejar la luz promueve un ambiente vívido y acogedor. Un espacio sobrio pero alegre.
El mobiliario es escaso y los espacios se abren para ser disfrutados, aún así la estancia sigue siendo acogedora y con un halo de gozosa paz.
Con información de airbnb.com