¿CÓMO DUERMES Y CÓMO USAS TU ALMOHADA?
1. Para dormir de lado: la almohada deberá permitir que el cuello quede horizontal, alineado con el resto del la columna vertebral. Para ello necesitará una almohada suficientemente gruesa y firme para salvar el ancho del hombro y que la cabeza no quede inclinada hacia abajo. Los hombres que duermen de lado, al tener los hombros más anchos que las mujeres suelen requerir almohadas algo más gruesas.
2. Para dormir boca arriba: necesitarás una almohada de firmeza y grosor intermedios que se adapte a la forma natural del cuello y de le soporte. Si es demasiado gruesa o demasiado fina las vértebras cervicales sufrirán por no mantener una postura natural durante muchas horas seguidas cada noche. Las consecuencias de una postura inadecuada pueden ser desde una falta de descanso hasta la rigidez de cuello o contracturas por la mañana.
3. Para dormir boca abajo: necesitarás una almohada blanda y fina, de modo que la cabeza y el cuello queden girados en una postura natural hacia el lado.
4. Si te mueves mucho y cambias de postura: una almohada de firmeza media será la más adecuada.